Reflexión sobre la actividad “Mi PLE”



Uno de los mayores problemas que afronta la enseñanza online es la pérdida de la relación y la interacción entre el docente y el alumno y, por supuesto, la interacción real entre los propios alumnos. Una suerte de “deshumanización” del proceso de aprendizaje. 


Como alumno que ha asistido a clases online y de forma presencial, puedo afirmar que en el primer tipo de educación, como es el caso del máster en el que nos encontramos actualmente, no existe la fluidez y la espontaneidad que puede darse en una clase presencial. Las clases son más mecánicas y las intervenciones de los alumnos se reducen, asumiendo un rol pasivo. Bien es cierto que la realidad no es tan dramática, ya que los docentes tienen estrategias para enmendar esta situación, como fomentar el uso del chat durante las videoconferencias, las opiniones a través del micrófono o las salas grupales para realizar actividades.

   

Con relación a la interacción entre alumnos, en la modalidad online es realmente complicado estrechar lazos con compañeros más allá de aquellos con los que compartes grupo para realizar actividades grupales (dhecho, lo normal es que no “pongamos cara” a la mayoría, reduciéndose a perfiles virtuales). Por esta razón, considero que la sexta y última actividad de la asignatura (el vídeo que encabeza esta entrada es mi aportación a la misma) supone un elemento fantástico para cambiar esta dinámica. Fue la primera actividad del máster en la que nos pedían que compartiéramos en un Padlet un vídeo en el que apareciésemos hablando a la cámara, lo que, superada la timidez inicial, permitió que conociésemos a las personas que se encontraban detrás de aquellos nombres y apellidos sin foto que aparecían de forma habitual por los foros de las diferentes asignaturas.  


Más allá del aspecto comentado en el párrafo anterior, el hecho de compartir el PLE con el resto de compañeros nos permite conocer distintos puntos de vista, formas de aprendizaje o los recursos que más interesan a cada uno, por poner algunos ejemplos. Este último punto tiene un gran valor porque es probable que se destaquen recursos que a lo mejor no habíamos utilizado en profundidad y que gracias a los testimonios de otros alumnos pueden despertarnos un interés renovado y darles una oportunidad. Para ampliar información al respecto, así como los orígenes del PLE, destaco la entrada del siguiente enlace:  


La sexta actividad de la asignatura me parece un recurso de gran utilidad y que sin duda aplicaré en mis clases online si tengo la oportunidad de impartir clases a grupos numerosos en los que, por citar una particularidad, no sea viable que durante la sesión tengan la cámara conectada. De este modo conseguiré varios objetivos: que realicen un ejercicio de reflexión sobre la forma en la que están aprendiendo, que mencionen los recursos que más utilizan y por qué (lo que será útil para sus compañeros) y, por último, pero no menos importante, será posible “humanizar” a nuestros alumnos, que al fin y al cabo es un gran paso dentro de la modalidad online.   


 

Un saludo a todos los que habéis llegado hasta el final de esta entrada y… ¡gracias por leer mi blog! 

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